Cristian Antonio Cooz.-“Fordow se ha ido” dijo escuetamente Trump. La ominosa noche del sábado 21 de junio de 2025, al menos 6 poderosas bombas GBU 57 A/B MOP de penetración profunda anti búnker fueron lanzadas por EE.UU. contra las instalaciones nucleares de Irán, generando destrucción sin precedentes en el aparato militar del país persa.
La sorpresa fue casi total, tomando en cuenta que, aunque las flotas de portaaviones norteamericanos y sus grupos de batalla estaban en posición en el Mediterráneo y el Golfo Pérsico, nadie creyó que el indeciso y parlanchín Donald Trump fuera a hacerlo.
¿Cómo lo hicieron? Más allá del portentoso hecho en sí, que a esta hora todo el planeta conoce, los detalles y los resultados son lo menos conocido hasta este domingo, y es lo que en este vídeo explicamos.
Para empezar, EE.UU. no solo se limitó a atacar la instalación nuclear de Irán en Fordow, ubicada a 100 metros bajo una montaña en la ciudad santa de Qom, sino que además, “remató” las instalaciones de Natanz e Isfahan, que ya habían sido bombardeadas por Israel desde que comenzará la operación León Ascendente el 13 de junio de 2025.
Servicios de inteligencias occidentales, están de acuerdo en qué tanto Natanz como Isfahan, “ya valieron”. Quedaron arrasadas por las bombas MOP de Estados Unidos y por escalofriante lluvia de misiles de crucero BGM Tomahawk lanzados desde submarinos norteamericanos en el Golfo Pérsico.
En cuánto a la instalación de Fordow, protegida bajo la montaña en Qom, se ha conocido de manera preliminar que las bombas MOP fueron lanzadas como se esperaba, por aviones bombarderos “invisibles” M2 Spirit que despegaron de la base norteamericana en el atolón Diego García, en el Océano Índico, a uno 5 mil kilómetros al sur de Irán.
Sobre Fordow, se sabe que “toda la montaña se estremeció”, como dijeron algunos residentes de Qom y que los sismógrafos alrededor del mundo registraron sismos en el área.
Al parecer, contra Fordow se usaron 4 de las 6 bombas GBU 57 anti búnker. Las mismas habrían penetrado unos 50 metros en la roca viva, explotando y generando un hongo apocalíptico de apariencia “cuasi nuclear” que estremeció la noche más oscura de Irán.
Debajo de la montaña, parece que se produjo un derrumbe total, sepultando las instalaciones y todo el personal que desafortunadamente se encontraba en ella. Al parecer, hubo pocos supervivientes.
Aunque las autoridades de Irán se apresuraron a decir que “solo se causaron daños leves a las entrada y salida” de Fordow, el presidente de Estados Unidos escribió “hemos completado con éxito nuestro ataque contra las tres instalaciones nucleares de Irán, incluyendo Fordow, Natanz e Isfahán. Todos los aviones se encuentran ahora fuera del espacio aéreo de Irán”.
