Los 133 cardenales que elegirán al nuevo papa se encerrarán desde este miércoles 7 de mayo en la Capilla Sixtina, ante el fresco de Juicio Final de Miguel Ángel y donde todo está ya preparado, aseguró este martes la directora de los Museos Vaticanos, Barbara Jatta.
En una comparecencia ante los medios, Jatta hizo un recorrido histórico y artístico de la Capilla y mostró cómo ha quedado ese recinto y algunas salas anexas, cerradas desde el pasado 28 de abril para preparar el cónclave.
«Los cardenales tendrán la responsabilidad de su voto bajo la bóveda» (con los frescos del Génesis de Miguel Ángel) y frente a la representación del Juicio Final del mismo artista del Renacimiento, en un trabajó que le encargó el papa Julio II y que llevó a cabo entre 1508 y 1512.
Los purpurados ocuparán en dos filas las paredes laterales y uno de los fondos – el opuesto al muro del Juicio Final – por lo que todos tendrán visibles esos frescos, según el vídeo difundido por la Santa Sede.
Según Jatta se han retirado algunos elementos de la Capilla para, aparte de instalar los asientos y la urna donde votarán, permitir la instalación de la salida de humos hacia la chimenea, con la que se da a conocer la elección del nuevo papa, siempre que el humo sea blanco.
«Es la capilla más famosa del mundo, un lugar santo y simbólico por la historia, el arte y la fe», aseguró la responsable de los Museos Vaticanos, quien explicó que la primera vez que se celebró allí un cónclave fue en 1492, para la elección de Alejandro VI, aunque la reunión de cardenales se ha llevado a cabo en diferentes lugares y solo desde 1996 es la sede definitiva, tal como estableció Juan Pablo II mediante la Constitución Apostólica.
Jatta afirmó que los últimos días, de preparación de la Sixtina, han sido «intensos desde el punto de vista emotivo», tras la muerte del papa Francisco, pero llevados «con espíritu de servicio».
Información de EFE