Las proyecciones de la Confederación de Asociaciones de Productores Agropecuarios de Venezuela (Fedeagro) indican que, para el año 2025, la producción nacional de arroz no experimentará un incremento significativo, manteniéndose en niveles similares a los registrados en 2024, cuando se cultivaron 110 mil hectáreas del cereal en el país.
La principal causa de este estancamiento es la falta de financiamiento en los estados productores clave: Barinas, Portuguesa, Cojedes y Guárico, tal como explicó el presidente del gremio, Celso Fantinel.
Con la previsión de una producción estancada para este año, se estima que se dejarán de sembrar alrededor de 40.000 hectáreas de arroz debido a la carencia de recursos económicos para realizar las inversiones necesarias.
Fantinel detalló que, para el año 2024, la cartera crediticia destinada al sector agrícola fue de aproximadamente 400 millones de $. Sin embargo, subrayó que se requieren al menos mil 500 millones de dólares para cubrir todas las necesidades anuales de inversión en esta área.
El dirigente agrario añadió que el sector privado solo puede financiar hasta el 52% de los requerimientos para un cultivo, enfatizando que estos fondos se utilizan principalmente para la compra de insumos.