Por: Cristian Antonio Cooz Como si fuera el rugido de leones, la madrugada de este viernes 13 de junio de 2025, más de 200 aviones de combate F-16, F-15 y F35 Lightning II se elevaron al cielo desde la frías pistas de las bases aéreas de Israel siguiendo las rutas de drones y misiles para dar un zarpazo a las ambiciones nucleares de Irán a unos mil kilómetros de distancia e impedir que Teherán le lanzara al menos 15 bombas nucleares, lo que habría generado sin duda, la escalofriante… Tercera y Última Guerra Mundial.
Este ataque que pone al mundo nuevamente al borde de una guerra generalizada en un día considerado de mala suerte en la cultura anglosajona, o por lo menos que amenaza convertir al Medio Oriente en un “lago de Fuego” (en otro de los peores escenarios), se llamó Operación “León Ascendente” y fue dirigida directo a la “yugular nuclear” de Irán.
Los ataques no solo fueron dirigidos contra instalaciones nucleares iraníes como la instalación Nuclear de Natanz, sino que además, contra casas y apartamentos de científicos y militares iraníes ligados al programa nuclear, como al jefe de la Fuerza Aérea Iraní; el Jefe de la Guardia Revolucionaria (que al parecer dormía tranquilamente en su cama); al cerebro del programa nuclear iraní y a otros altos funcionarios.
Al parecer, el Mossad (Servicio Secreto de Israel) tenía pruebas de que en los próximos días, “el régimen más peligroso del mundo”, como Israel califica a Irán, estaría listo para tener al menos 15 bombas nucleares más potentes que las lanzadas sobre Iroshima y Nagazaki en 1945 al final de la Segunda Guerra Mundial.
Los terroríficos hongos de las explosiones convencionales, pronto rompieron la noche iraní, dañando seriamente sus ambiciones nucleares con la cual, movidos por su irracional odio, pretendían destruir al estado de Israel en una hecatombe atómica.
Los objetivos fueron fábricas de armas, centrales nucleares, bases militares e individuos particulares. Cuando empezaron a llover las bombas, los mandos iraníes ordenaron a sus aviones de combate hacerse al aire, pero no para combatir, sino para evitar que los destruyeran en tierra. Mientras tanto, Irán lanzó al menos 200 drones y misiles balísticos contra Israel, de los cuales, casi todos fueron interceptados sobre Siria.
Iban a usar las 15 bombas nucleares
En su feroz odio por Israel, Irán había estado enriqueciendo uranio al 99% al margen de las conversaciones con Estados Unidos y se sabe que aparentemente, la cantidad disponible, alcanzaba para no menos de 15 bombas nucleares que sin pensar en las consecuencias, Irán estaba dispuesta a lanzar sobre Israel para “borrarlo del mapa” y luego dialogar con el resto del mundo. El delirante, demencial y atroz plan Iraní, al parecer contemplaba usar aviones de combate y misiles para lanzar las bombas nucleares contra Israel.
Expertos militares parecer estar de acuerdo en que esta catástrofe que ha evitado la operación “León Ascendente”, estuvo demasiado cerca de provocar una reacción en cadena y meter al mundo en la Tercera y Última Guerra Mundial. “Estuvimos muy cerca de la destrucción del mundo tras la destrucción de Israel”, han dicho algunos de los expertos militares occidentales.
Actualmente el mundo contiene la respiración. Aunque Israel cree haber eliminado gran parte del Programa Nuclear Iraní, el feo espectro de la Tercera y Última Guerra Mundial todavía no se ha desvanecido del todo, pues, sumado a la guerra de Rusia contra Ucrania, el mundo parece estar en un escalofriante escenario para la Tormenta Perfecta que daría al traste con la vida del planeta.