Semana vinotinto: un paso atrás.

1785

Luis José Castellanos/@LJx14.- El viernes la selección venezolana de fútbol mostró un rendimiento muy pobre, ante Colombia la vinotinto parecía aquella selección que era llamada la Cenicienta de suramérica, un equipo sin control, desordenado, con las líneas muy alejadas, con relevos que tardaban una eternidad en llegar, de momento fue un equipo amateur e incluso parecía una practica televisada, se puede creer que se ha dado un enorme paso atrás, que los jugadores ya no están para formar parte del equipo que ya tienen que llamar a otros que uno sirve pero el otro no, que Fariñez no está jugando o que incluso el Dt no sirve cuando apenas habían dos prácticas realizadas con una selección que estuvo a punto de presentar 9 bajas. ¿Pero realmente es para tanto? La verdad es que no.

Un nuevo ciclo, nuevas ideas, mismo plantel.
Hay que ser críticos eso está claro, hay que pedir que la selección juegue bien y eso también está claro, pero lo que no podemos es olvidarnos en que situación deportiva estamos, el entrenador José Peseiro fue presentado en febrero y apenas pudo entrenar por primera vez con su equipo 8 meses después, sin los jugadores que tenía en mente en un principio, en cierto punto era lógico que muchas de sus decisiones en el planteamiento del juego fallaran, eso sí ni la mentalidad ni el juego que presentó el equipo fue el más aceptado, todos ellos han compartido camerino, todos los que jugaron ya han sido seleccionados, han sido titulares o han entrado de suplentes así que no era posible que a la cancha saliera un equipo racano y sin ganas de luchar un balón, el planteamiento de Peseiro fue muy distinto al de Dudamel, muy entregado a la ofensiva cuando el anterior técnico era muy entregado a la defensiva y eso se hizo notar los relevos no llegaron a tiempo y la marcación escalonada tampoco surgió efecto por lo tarde que llegaron mucho de los jugadores y si los agarraban bien parados no había una presión controlada las líneas no salían ni entraban al mismo tiempo, muchos de los problemas fueron por cuestiones de entrenamiento y del entendimiento de lo que deseaba el técnico pero a partir de aquí hay mucho que rescatar.

Ofensiva pero con equilibrio.
El 4-2-3-1 que plantea Peseiro es hasta el momento uno de los esquemas más pedido por el fanático vinotinto, pero quedó en evidencia que se necesita mucho trabajo aún para aplicarlo en la selección, el técnico tuvo que pasar al 4-4-2 para intentar equilibrar al conjunto y hasta que por último término usando el anterior 4-3-3 pero con un toque distinto que veremos enseguida. Con su esquema principal con 2 volantes mixtos, un 10, dos extremos y tan solo un delantero, hubieron muchas cosas interesantes que rescatar en el equipo, los laterales siempre se mostraron abiertos para entregarle una salida limpia a los centrales y los pivotes que se metían entre los defensas, la apertura de los laterales impulsaba a que los extremos se cerraran quedando como volantes internos dispuestos a entregar desequilibrio desde el interior para posteriormente abrir la cancha por las bandas por lo que el equipo quedaba así:

Eso sí nunca llegó el pase las líneas fueron cerradas en todos los frentes por lo que cada recuperación hizo muchísimo daño, los centrales fueron sumamente lentos para cubrir tanto espacio pues en la obligación de conseguir el pase necesario el equipo se desordeno de tal manera que hasta hubo puntos en los que quedaba tan solo un central en el fondo ante dos delanteros colombianos, y esto paso factura, el desorden reino y todos ya sabemos lo que ocurrió. El 4-4-2 fue poco y nada solo fue un intento de entregar un orden en la defensa pero la apuesta ofensiva seguía siendo la misma, los laterales eso sí llegaron e hicieron lo que se les pidió, los únicos dos ataques con peligro de gol vinieron con sendos zapatasos de fuera del área a perfil cambiado de ambos laterales pero el regreso seguía dando mucho de que hablar.
Para el segundo tiempo el equipo entro con el 4-3-3 que se venía usando con el anterior cuerpo técnico y se notó mucho orden y más comodidad pero seguía faltando la garra y el intento por crecer en el partido. De aquí en adelante se puede estudiar el verdadero paso atrás.

El verdadero paso atrás.
En este último punto, en cuanto al esquema utilizado en el segundo tiempo se puede visualizar el verdadero paso atrás que debe dar Venezuela, no aquel con el que nos golearon, y nos hizo recordar los peores años de eliminatorias, si no el de volver a un esquema que nos entrego mucho equilibrio, eso sí con los cambios necesarios para ir inyectando las intenciones del técnico Peseiro.
La portería debe ser para Fariñez hay que darle el respeto y el espaldarazo al mejor portero del país eso sí, no se tomaría para nada a mal que salga Joel Graterol pues con un nuevo técnico que busca lo mejor para el plantel no sería nada raro que se realicen cambios buscando el mejor momento de cada uno de ellos, en los centrales no hay mucho que hacer Chancellor y Angel son con los que contamos para esta doble fecha, Villanueva no llegara a tiempo y Luis Mago sigue presentando problemas de rendimiento, aunque los centrales titulares sean muy lentos el conocimiento del técnico ayudará para evitar subir tanto al equipo sin el control necesario para evitar los contragolpes, para el lateral derecho debería entrar Alexander González, después de Rosales es el mejor lateral derecho de Venezuela aún, y por la izquierda nuevamente Roberto Rosales, aunque si es por gusto ya es hora de que Navarro juegue por izquierda para ir aclimatando al chico a una banda que lo pide a gritos y Rosales se mantenga por la banda derecha. El medio campo es hasta ahora el punto importante es necesario la entrada de un pivote de corte pero con buena salida y allí el Brujo Martínez estaría sumando muchos puntos, es el ideal para que de ese toque inicial que tanto le faltó a Venezuela tiene buenos cambios de banda y puede meterse entre los centrales para dar más equilibrio y tranquilidad a una defensa central que no está para cubrir mucho espacio aunque esté trabajo y con igual nivel de calidad puede entregarlo Casseres Jr, ante Colombia jugo unos minutos y mostró grandes argumentos, Rincón en compañía de Martínez o Casseres en la ayuda de entregar salida limpia y recuperar la pelota en la zona alta de los últimos ¾ de cancha y un poco más adelantado Yangel Herrera, en una versión Granada, dueño de todo el medio del campo con la capacidad de dar un pase entre líneas abrir las bandas o unirse con los extremos cuando se cierren, además taparía de gran forma junto con el 9 de área las salidas de los centrales paraguayos que es muy buena, con Yangel de Mediocentro ofensivo se ganan muchos puntos, que el técnico inyecte sus ideales pero sin perder el equilibrio de la marca y de los relevos oportunos. En la delantera ya teniendolos a todos no hay mucho que hacer Soteldo con sus desbordes por izquierda es quien hara más daño, Aristiguieta en la delantera entrega buen juego aéreo y capacidad para echarse atrás y entregar pelotas limpias a las diagonales de los extremos, mientras que por derecha estaría Machis, el de Tucupita ya jugo está temporada por banda derecha y lo hizo muy bien, aunque se pierde un poco su pegada, sus centros envenenados al área pueden ser muy valiosos o los pase rastreros en dirección a los medios campista con llegada, además el lateral izquierdo de Paraguay entrega muchas libertades y junto con los desbordes de González o Rosales pueden complicarle mucho la vida.
Otro punto de vista para el once de Venezuela con los cambios necesarios puede ser repetir el doble pivote de Yangel y Rincón e integrar a Otero al medio campo adelantado cómo estuvo Savarino en el segundo tiempo ante Colombia, con mucho retroceso para recibir balones limpios y con el suficiente manejo para acercarse a la delantera venezolana, además con Otero se gana algo muy necesario en la selección, el balón parado, hasta ahora es nuestro mejor especialista en los cobros de tiros libres y a Paraguay le hace mucho daño el juego aéreo.

Con una Venezuela más completa se puede empezar a respirar una nueva oportunidad para sumar en la primera doble fecha de las eliminatorias, aunque se halla perdido de una fea manera, esa no es la verdadera Venezuela no es el nivel que tienen, individualmente no es una Venezuela racana y sin ideas, el martes observaremos un mejor partido, un mejor juego línea por línea y una selección que demostrará que tiene garras y ganas de salir adelante y dar un paso firme para competir por un puesto en el mundial 2022.