Cristian Antonio Cooz.-Los habitantes de Tierra Santa, tanto Palestinos como israelíes, siguen viviendo el terror más puro y abyecto desde que la organización terrorista Hamás desencadenara el lunes 10 de mayo una lluvia de cohetes desde la franja de Gaza en su empeño demencial de destruir el Estado de Israel.
Ahora Israel, que ha defendido su territorio con su impresionante sistema antiaéreo Iron Dome o Cúpula de Hierro, lanzó la madrugada de este viernes 14 de mayo un devastador bombardeo aéreo y artillero de preparación, mientras que tropas, transportes blindados y tanques esperaban para cruzar la frontera y lanzar una ofensiva terrestre total en Gaza.
Desde el lunes, los terroristas de Hamás y la Yihad Islámica, han lanzado más de 1800 cohetes contra Israel, de los cuales se estima que la Cúpula de Hierro ha destruido en vuelo no menos del 90%, lo que ha generado el asombro del mundo entero.
120 muertos en Palestina y 7 en Israel
Desgraciadamente la violencia desencadenada por Hamás había dejado hasta la tarde del jueves 13 de mayo, unos 120 palestinos muertos, entre ellos 31 menores de edad; así como 7 ciudadanos de Israel fallecidos y varios centenares de heridos entre ambos bandos.
Organizaciones humanitarias creen que con el intenso bombardeo de esta madrugada del viernes 14 de mayo, la cifra de muertos y heridos podría ascender dramáticamente a miles de bajas, lo que sería un terrorífico escenario como ya ocurrió en el año 2014, en el último enfrentamiento de este tipo entre Israel y las milicias islámicas que quieren borrar del mapa la existencia del estado Judío con ayuda de regímenes religiosos como el de Irán.
Expertos militares creen que Israel no quiere seguir posponiendo la derrota total de Hamás, la Yihad Islámica y otras milicias terroristas que operan desde Gaza, para que se acabe de una vez la amenaza cíclica a su existencia como Nación.
Las bombas no discriminan
El mando del ejército israelí ha asegurado que en 40 minutos han lanzado rondas artilleras y de bombardeo aéreo contra puestos avanzados de Hamás y sus demás aliados terroristas y contra los túneles que estos utilizan para desplazarse en la Franja de Gaza.
El jueves 13 de mayo las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) destruyeron un edificio de varias plantas en el barrio de Rimal, centro de Gaza, donde funcionaba un centro de inteligencia de Hamás.
Al menos 5 edificios de varios pisos han sido completamente destruidos hasta sus cimientos.
Desgraciadamente las bombas, por más “inteligentes” que sean, no discriminan entre terroristas islámicos y la población civil inocente que se ve envuelta en esta vorágine de fuego, destrucción y muerte.
Aunque Israel apunte contra los puestos de Hamás, las bombas y misiles también destruyen por igual edificios y casas de civiles en un territorio de apenas 365 kilómetros cuadrados y poblado por 2 millones de personas.
“Palestinos deben revelarse contra Hamás”
Fuentes anónimas del ejército de Israel han dicho que el pueblo Palestino debe revelarse contra la presencia de Hamás, Yihad Islámica y otros terroristas en la Franja de Gaza, “porque son estas organizaciones criminales, llenas de odio y destrucción, quienes los arrastran al abismo”.
“Esta no es la última palabra y esta operación durará el tiempo que sea necesario”, ha dicho el Primer Ministro de Israel Benjamin Netanyahu en un video difundido por las redes sociales la madrugada de este viernes.
Esto indica que la operación terrestre está a punto de comenzar y que los tanques israelíes y sus tropas están por ingresar a la Franja de Gaza para intentar destruir los puestos de misiles y escondrijos de los terroristas de Hamás.
En esa inminente ofensiva terrestre, las tropas israelíes estarían rodeadas (como ya ha ocurrido antes) de un pueblo hostil que posiblemente intente dificultar su avance.
Alarmas que pones los pelos de punta
Desde el pasado lunes las alarmas en Israel no han parado. Muchos extranjeros en Tel Aviv lo han descrito como “algo aterrador, hace temblar cada molécula de tu cuerpo de puro miedo; te pone los pelos de punta, te paraliza, te pone la piel de gallina; un frio corriendo por tu espina dorsal y cuando puedes correr no dejas de mirar al cielo, esperando ver el cohete para apartarte y que no te caiga en la cabeza”.
Los terroristas de Hamás han lanzado unos 1800 cohetes sobre Israel, de los cuales 450 defectuosos han caído en la misma Franja de Gaza; el sistema Cúpula de Hierro de Israel ha destruido unos 1215 cohetes, pero otros 135 han caído en Tel Aviv, Jerusalén y otras ciudades de Israel.
Esta vez, en un conflicto de profundas raíces y muy complejo, la excusa de los terroristas de Hamás para desencadenar la lluvia de cohetes contra Israel, ha sido el desalojo de varias familias palestinas del barrio Sheikh Jarrah de Jerusalén.
Pero esta vez, Hamás, quien como dicen las Fuerzas de Defensa de Israel «utiliza la población civil de Gaza como escudos humanos», ha calculado mal el golpe, porque no contaba con la eficiencia del Sistema Antiaéreo Cúpula de Hierro ni con la determinación israelí que le ha propinado tanto daño a su estructura terrorista y plasmada en las palabras del primer ministro Benjamín Netanyahu al decir: «esto es solo el principio. Les vamos a golpear como nunca habían imaginado».
