Cristian Antonio Cooz.-Acorralado por las multitudinarias y violentas protestas callejeras; por la renuncia en cascada de la policía; por la «sugerencia» de dejar el poder de los militares y por la decisión de la Fiscalía General de Bolivia de enjuiciar a todos los implicados del Tribunal Supremo Electoral en el fraude del 20 de octubre, finalmente…cayó Evo Morales.
La mañana de este domingo 10 de octubre, «la OEA le dió una grave estocada al difundir que efectivamente hubo fraude electoral que daría a Evo su cuarto mandato», dijeron manifestantes que celebraban a las afueras de la Casa Grande del Pueblo, en La Paz.
Evo tomó la decisión de renunciar luego que el comandante general de las Fuerzas Armadas, Williams Kaliman, y el de la Policía Nacional, Vladimir Calderón, le solicitaron amablemente que «diera un paso al costado para desactivar la crisis».
Cayó, cayóoo, cayóooo
En La Paz y en todo el país altiplánico, los ciudadanos celebraban este domingo la renuncia de Evo, luego de tres periodos al frente del gobierno en que estableció políticas socialistas del corte cubano y venezolano.
Se supo que Evo renunció desde el feudo cocalero de Cochabamba, donde quería buscar apoyo de los militantes del Movimiento al Socialismo para mantenerse en el poder.
En todo el país se dejaban escuchar los gritos frenéticos ¡cayó, cayóoo, cayóoo!
Caravanas de ciudadanos se concentraron a celebrar a las afueras de la Casa Grande del Pueblo, el imponente edificio que fungía como casa de Gobierno de Evo Morales desde 2018.
Luis Fernando Camacho encabeza las multitudinaria caravana de opositores. El ex candidato Carlos Mesa también celebraba con el pueblo boliviano.
¿Huirá a Venezuela o a Cuba?
Hasta la tarde de este domingo 10 de noviembre, se desconocía si Evo permanecería en su feudo cocalero.
Algunas fuentes extraoficiales indicaban que tenía programado un vuelo fuera del país. Pero no precisaron hacia dónde.
¿Huirá a Venezuela o a Cuba? Se preguntaron a vox populi muchos de los opositores en La Paz.