Cristian Antonio Cooz.-La ciudad de Arica siempre recordará con amor, orgullo, asombro, respeto y otros muchos buenos sentimientos, a una de las mujeres más valientes y luchadoras de la historia del norte de Chile como lo fue Teodolinda Toledo Tapia quien el pasado miércoles 10 de agosto falleció a sus 88 años, rodeada del amor de familiares y amigos, sublimando así su digna y notable vida humana la cual dedicó a la justicia y al bien del prójimo.
Teodolinda fue una de las fundadoras de Las Damas de Rojo, la organización humanitaria Voluntarias de Hospital, fundada el 4 de octubre 1964 para dar ayuda física, moral y espiritual a los pacientes que lo necesiten.
El legado de Teodolinda va mucho más allá de sus logros personales y grupales, va mucho más allá de Las Damas de Rojo, que hoy por hoy, en tiempos de pandemia, cuenta con más de 81 filiales y con más de 4.500 voluntarias que sirven en todo Chile, desde Arica a Punta Arenas.
La Dama de la Lámpara
Teodolinda Toledo Tapia fue un modelo a seguir para quienes tuvieron el privilegio de conocerla y para todo Chile. En Arica, fue una intachable Tesorera de la Unión Comunal de Junta de Vecinos; Presidenta del Centro General de Padres de la Escuela Esmeralda y Presidenta General de Padres y Apoderados del Liceo Domingo Santa María.
Pero como ya se dijo, su espíritu humanitario trascendería sus logros personales. Cuidó a su familia sobre la base de fe y buenos principios; orientó a sus dos hijas que le sobreviven (Ermelinda y Alejandra Vásquez Toledo) con la certeza de que el Bien siempre se impondrá sobre el mal, y que cada ser humano debe hacer su parte sin menospreciar al prójimo.
Creía en la humanidad, pese a que esa misma se empeñe en restarse méritos, pues estaba segura de que el Hombre era esencialmente bueno, no esencialmente malo. Por eso luchó sin parar para llevar luz y esperanza a los más necesitados.
Hablar de Teodolinda Toledo Tapia es hablar de un corazón valiente y justo; es hablar de una luchadora de la talla de Florence Nightingale (1820-1910) “la Dama de la Lámpara” o de Irena Sendler (1910-2008) “El Ángel del gueto de Varsovia” y de otras grandes mujeres de la historia humana que lo han dado todo por amor al prójimo, aun a riesgo de su propia comodidad e incluso de su propia seguridad.
Su amor por los niños
Su convicción de servir a los más necesitados, la llevó más allá de ayudar y consolar a pacientes con Las Damas de Rojo; su amor por los niños le llevó por el camino de la docencia natural, ya que sin ser profesora del sistema educativo tradicional, fue una gran maestra para los niños que orientaba.
Y es que entre tantas acciones loables de la Dama Teodolinda, estuvo la enseñanza que dirigió a los niños de Arica que tanto amaba. Es sabido que sacaba tiempo de sus actividades para juntar a los infantes que necesitaban reforzamiento en distintas áreas educativas y se las proporcionaba, usando sus dotes docentes naturales y sus amplios conocimientos generales.
Hoy, Arica y todo Chile, saludan el espíritu bueno de la Gran Dama, Teodolinda Toledo Tapia y aunque es inevitable sentir tristeza por su partida física, no la despiden con un obituario; se le despide con el mismo amor y entusiasmo que ella entregó a quienes le necesitaron. Sus familiares, amigos y todos los ariqueños, se consuelan con saber que irá en presencia del Señor como el alma bondadosa que es, y que su legado jamás, jamás será olvidado.
