El coordinador de Vente Venezuela en Carabobo, Henrry Henríquez Machado, denunció que la entidad permanece sumergida en una grave crisis de servicios públicos sin precedentes, toda vez que sus habitantes conviven a diario con mayor escasez de transporte, fallas en el suministro de gas, apagones, largas colas e inseguridad.
Advirtió sobre la incapacidad de las empresas públicas en la entidad para prestar servicios y satisfacer las demandas de los ciudadanos, así como las graves consecuencias que todo ello conlleva y que se han traducido en un marcado deterioro de la calidad de vida de todos los carabobeños.
Detalló que en el caso del municipio Carlos Arvelo, no sólo es precaria la situación del transporte sino que se somete a los usuarios a la inseguridad de tener que trasladarse en vehículos no homologados para prestar el servicio, “lo que hace responsable a las autoridades municipales y estadales de los daños que puedan sufrir los ciudadanos como consecuencia de permitir que se utilicen vehículos de carga como transporte de personas”.
Recordó que ya se han registrado accidentes en estos camiones cargados de personas que necesitan trasladarse entre Carlos Arvelo y municipios vecinos, dejando varios muertos y lesionados, producto de colisiones o volcamientos, muchas veces por el marcado deterioro de la vialidad que está siendo socavada por el Lago de Valencia.
De igual manera, el máximo representante de la tolda azul en la entidad, denunció el insuficiente suministro de gas doméstico y las fallas de la electricidad y servicio telefónico en esta zona de Carabobo.
En cuanto al municipio Guacara, Henríquez Machado precisó que las colas para comprar gas son de 4 a 6 horas y especificó que “hemos pasado de recibir un servicio en nuestros hogares a tener que salir a hacer cola con una bombona y regresar con la misma a nuestra vivienda, con el consecuente peligro para la seguridad de los ciudadanos”.
Denunció que además del riesgo que esto representa –toda vez que ya se han registrado explosiones de estos cilindros con gas-, se traduce en un atraso significativo para los venezolanos en general.
Sostuvo que en el caso de Valencia, al igual que en el resto de los municipios, el transporte es rudimentario en un alto porcentaje. “La existencia de las denominadas perreras es cada vez más frecuente, un tipo de transporte que en sí mismo constituye un ataque a la dignidad humana”.
Recordó que además proliferan los cortes eléctricos que ya son a diario, con el riesgo de pérdidas de los aparatos eléctricos y de que se descomponga lo poco que pueden comprar y guardar los ciudadanos en la nevera.
Sobre el suministro de agua, denunció racionamientos cada vez más extensos y precisó que cuando llega, el líquido es de muy mala calidad debido a la incapacidad de Hidrocentro de potabilizarla ante la inoperatividad de plantas de tratamiento de aguas residuales.
En cuanto al litoral carabobeño, el coordinador de Vente Venezuela en Carabobo dijo que en Puerto Cabello y Juan José Mora están sometidos a apagones constantes, mientras que en los municipios de los Valles Altos, además de sufrir largos apagones, padecen por las fallas en el servicio telefónico, falta de transporte y escasez de alimentos.
“Además todos los municipios de Carabobo son víctimas de la inseguridad lo que demuestra la incapacidad de los gestores públicos regionales de administrar el estado y garantizar al menos condiciones de vida mínimas para los ciudadanos”, insistió.
Para colmo -señaló el jefe de la tolda azul en Carabobo- hoy nuestros adultos mayores son sometidos al atropello de tener que hacer colas para cobrar lo que por derecho y por haberlo cotizado, les pertenece, que es su pensión. “La pensión de los jubilados no es un regalo ni una prebenda, ellos cotizaron, es su dinero”.
@ruthlaverde
