Cristian Antonio Cooz.-Algunos dicen que de un certero balazo que le destrozó el corazón y otros que fue acribillado por tiros y explosiones de morteros durante un ataque sorpresa de Ucrania a la base Chornobaivka, cerca de la ciudad de Jerson, al sur de Ucrania, a orillas del mar Negro, junto al río Dniéper, fue como murió el Teniente General Yakov Rezantsev.
El Teniente General Yakov Rezantsev, de 48 años, era el comandante del 49º ejército combinado de Rusia, y ese neblinoso y aciago día jueves 24 de marzo (justo cuando se cumplía un mes exacto de la invasión inicada el 24 de febrero) había ido en persona a Jerson, la primera ciudad de Ucrania conquistada por Rusia, supuestamente para levantar la decaída moral de las tropas rusas, según informó el Ministerio de Defensa de Ucrania.
Durante su visita a la base aérea de Chornobaivka, supuestamente el Teniente General Rezantsev, había reunido a las tropas para lanzarles un encendido discurso de moral, patria o muerte, invocando a los héroes de la Gran Guerra Patria (Segunda Guerra Mundial), donde les recordó que (según la sesgada historia rusa), ellos ganaron solos contra los ejércitos Nazis de Adolf Hitler sin ayuda de los aliados occidentales.
Llamada telefónica mortal
El discurso que Rezantsev les despachó a sus tropas muertas de hambre, frío, rabia por la pérdida excesiva de camaradas y atenazadas por el remordimiento de invadir un país hermano, no hizo más que levantar algunos vítores falsos entre la tropa, pero más bostezos de cansancio y sueño, según los servicios secretos occidentales.
Este estado de ánimo fue comprobado por varias llamadas telefónicas por línea abierta que la inteligencia de Ucrania logró interceptar y donde los soldados se quejan que “este Rezantsev es el mismo que dijo que la Operación Militar Especial (Invasión de Ucrania), sólo duraría unas pocas horas”.
Al parecer, el Teniente General había arengado a las tropas del 49º ejército combinado, cuatro días después de iniciada la invasión a Ucrania, asegurándoles que “esto no duraría más que unas pocas horas y que luego volverían a casa”.
Tras el discurso, a un mes y un día de la sangrienta invasión ese jueves 24 de marzo, las tropas, aunque trataban de disimularlo, “veían feo a Rezantsev” y él lo sabía. Procuró el alto oficial reunirse con su estado mayor para dictar algunas “líneas maestras” y tenía previsto abandonar la Jerson para dirigirse a su centro de comando estratégico, supuestamente en la seguridad de la retaguardia, en la península de Crimea.
Sus tropas no hicieron mucho por él
Tras las llamadas telefónicas de los soldados que recriminaban “Retzansev está aquí. Dijo que la guerra sólo duraría unas horas y llevamos un mes…”. Las tropas de Ucrania no perdieron tiempo. Lanzaron un cruento ataque contra la base aérea de Chornobaivka.
Rezantsev trató de huir, pero para su desgracia, los ucranianos tenían ubicado el edificio donde se encontraba su centro de comando temporal y contra él cargaron. Dicen que las tropas rusas no repelieron el ataque en toda regla.
Los soldados rusos solo que trataron de protegerse “sin hacer mucho por su comandante Retzansev, quien murió según dicen unos, acribillado, por esquirlas de explosiones de mortero y otros que por un francotirador que le destrozó el pecho de un certero balazo. Según los servicios secretos occidentales, Retzansev se une así a la lista de 7 generales rusos abatidos por Ucrania desde el inicio de la invasión de Putin.
Así acabó la vida del arrogante Teniente General Yakov Retzansev, el mismo que subestimó a Ucrania y dijo que la invasión sería una especie de Paseo Militar y que eso no duraría más que unas pocas horas.
