Cristian Antonio Cooz.- Presuntamente “sobra´o y amenazador”caminaba pa´rriba y pa´bajo por la avenida principal de Turumo, parroquia Caucagüita, municipio Sucre del estado Miranda, un sujeto conocido como “El Yeison”. No sospechaba que la granada fragmentaria que llevaba en el bolsito koala alrededor de su esquelética cintura, al parecer para delinquir, iba a sacarle las tripas a él mismo.
Era la mañana de este jueves (cuando según habitantes de la zona), todos se apartaban aterrorizados a su paso, como si se tratara del mismísimo diablo. Este individuo llevaba la muerte con él, encapsulada en la granada y creía que podía contener al monstruo.
Cada rato la sacaba, la besaba y la acariciaba con morbo. Reía diabólicamente, mostrándola a todo mundo para sembrar pánico en sus corazones. Más le habría valido tirar aquel demoníaco artefacto de guerra, pues el genio maléfico contenido en él, estaba a punto de salir…para destrozarlo sin piedad.
Quitó la espoleta…y la guardó
Aquel ser que pretendía ser “el más malo de todos”, era en realidad un inexperto en el manejo de aquel explosivo. Su impericia e imprudencia, le llevarían a un escalofriante final.
“El Yeison, jurando que se las sabía todas más una, le quitó la espoleta de seguridad a la granada, y fue tan irracional (para no decir otra cosa), que en vez de tirarla lejos, le puso de nuevo la anilla. Con ambas manos la metió de nuevo al bolsito sin darse cuenta que estaba activada (…) un corto instante transcurrió y la granada detonó ¡pummm!”, según dijeron testigos que no quisieron ser identificados.
El ruido de la explosión se mezcló con sangre y el aullido de dolor desgarrado de “El Yeison”. En su vientre se abrió un monstruoso hueco, por donde se le chorrearon las tripas, que fueron a caer sobre el asfalto, a un lado de su cuerpo destrozado. La atroz explosión le arrancó también ambas manos de cuajo, dejando solo colgajos de piel en los muñones.
Jugaba con la muerte
Testigos circunstanciales del horrible hecho, insistieron en que “El Yeison” estaba jugando con la muerte y esta le abrió la barriga con su filosa guadaña al salir precipitadamente de la granada donde estaba aprisionada. Usuarios de twitter como el expolicía @aurediego, reseñó el bárbaro suceso y hasta publicó dos horripilantes fotografías.
Fuentes extraoficiales identificaron a “El Yeison” como Yeison Parica de 22 años. Al parecer, un supuesto compinche de la víctima, fue herido por la onda expansiva, las esquirlas y cubierto de pies a cabeza por las vísceras, sangre y piel del destrozado individuo.