Cristian Antonio Cooz.-Una monstruosa nube de cenizas y Dióxido de Azufre SO₂ proveniente de la poderosa erupción del volcán Cumbre Vieja de La Palma, Islas Canarias, España, se cierne sobre el Mar Caribe y sobre los territorios de Venezuela y Colombia.
La siniestra nube de cenizas y Dióxido de Azufre SO₂ cruzó el Océano Atlántico hasta la cuenca del Mar Caribe, situándose sobre las capas superiores de la atmósfera, tal como lo detectó el 3 de octubre el satélite Copernicus Sentinel-2 de la Agencia Espacial Europea ESA.
Esta irritante nube de cenizas y Dióxido de Azufre SO₂ podrían permanecer sobe Venezuela durante gran parte del mes de octubre e incluso más, dependiendo de las emisiones del volcán Cumbre Vieja en la isla de La Palma, que a la fecha, ha lanzado a la atmósfera no menos de 20 mil toneladas de este material corrosivo y tóxico, como lo indica la Sociedad de Astronomía del Caribe.
Lluvia ácida y días oscuros sobre Venezuela
Según los datos aportados por la misión Copernicus Sentinel-2 de la ESA, la nube irritante de cenizas y SO₂, al ser partículas suspendidas, tienen un efecto potente sobre la atmósfera, por lo que podría generar la llamada lluvia ácida y oscurecimiento del cielo en Venezuela, aparte de posibles afecciones respiratorias en los humanos.
Es de recodar que la lluvia ácida o con un PH menor a 5, (puede llegar incluso a PH3, el PH del vinagre) se da por la mezcla de la humedad atmosférica con elementos químicos como el Dióxido de Azufre SO₂ que pueden ser producto de la actividad humana con sus combustibles fósiles o producto de la naturaleza a través de los volcanes.
Esta lluvia ácida, (o de PH del vinagre en casos extremos), pueda tener efectos negativos en la vida acuática y la vegetación, aparte de su incidencia en la vida humana. Aunque afortunadamente, al parecer de la ONG venezolana, Azul Ambientalista, «no causará mayor riesgo»
Según los especialistas, estas mismas capas de humo grueso que impedirá el paso de la luz del sol por un lapso no determinado (dependiendo de la actividad volcánica), representa un problema real para la salud, por lo que recomiendan a los ciudadanos el uso de mascarillas cuando estén al aire libre.
Problemas respiratorios
Los expertos recuerdan que las cenizas y Dióxido de Azufre SO₂ generan un oscurecimiento del entorno, dejando a los venezolanos sumidos en días grises y ominosos que podrían afectar el ánimo y la psiquis, pero principalmente la salud física.
Como se sabe, aparte de la posible lluvia ácida, el Dióxido de Azufre SO₂ puede llegar a causar broncoespasmos en casos graves, o en menor medida, tener efectos irritantes en las vías respiratorias, otros efectos adversos en pacientes cardiovasculares, asmáticos, con enfermedades pulmonares, mujeres embarazadas, ancianos y bebés.
Como recalca Gustavo Carrasquel Parra, Director General de la ONG Azul Ambientalista, “el paso de la nube por Venezuela no causará mayor riesgo”, pero recomienda el uso de mascarillas para reducir los efectos de la nube de Dióxido de Azufre SO₂ en el cuerpo humano.
“…el uso de mascarilla ayuda. Tendríamos que tener un número específico de reportes para determinar la magnitud de los efectos en la población”, acotó Carrasquel Parra.
Así, mientras persista la siniestra nube de Dióxido de Azufre SO₂ sobre el Caribe, los venezolanos estarán sumidos en días oscuros y alertas ante la posible caída de la lluvia ácida.
